COCHES ELÉCTRICOS
Hyundai Ioniq 5 N: el coche eléctrico que revoluciona los cánones de la deportividad, inspirado en el automovilismo
La revolución eléctrica llega al mundo de los deportivos con el nuevo Hyundai Ioniq 5 N. Más bajo, más ancho y más largo, y con detalles en negro y neumáticos anchos.
Pero no es sólo la carrocería lo que impresiona, sino la mezcla de tecnologías heredadas del automovilismo, con la incorporación de un nuevo motor potenciado que entrega unos impresionantes 650 CV.
Las características especiales incluyen una columna de dirección reforzada, adhesivo extra y 42 puntos de soldadura adicionales. La innovación también se extiende a dispositivos como el Pedal N y el Optimizador de Derrape N, que adaptan la conducción para obtener el máximo rendimiento.
Diseño y dimensiones
El nuevo Hyundai Ioniq 5 N es 20 mm más bajo que el coche del que deriva, 50 mm más ancho en la parte inferior y 80 mm más largo, y se distingue por detalles en negro, neumáticos más anchos, un pronunciado extractor trasero y un gran alerón.
Rendimiento y tecnología
Este deportivo propulsado por batería combina Electrified-Global Modular Platform (E-GMP) con las tecnologías de N desarrolladas en el automovilismo y la experiencia adquirida con los modelos electrificados RM20e, RN22e y N Vision 74 'Rolling Lab'. El coche es un AWD de doble motor y 650 CV con una dinámica inspirada en los rallies.
Estructura y poder
Con una estructura con 42 puntos de soldadura adicionales y 2,1 metros de adhesivos adicionales, bastidores delantero y trasero mejorados, y un motor y una batería mejorados, el Ioniq 5 N luce ejes motrices integrados inspirados en el WRC, una columna de dirección reforzada y una mayor relación de dirección.
Tecnologías de conducción y control
Además, el Pedal N ayuda a conseguir una entrada en curva más directa; el Optimizador de Deriva N a mantener el ángulo de deriva; y la Distribución de Par N permite una distribución flexible del par delantero y trasero ajustable a 11 niveles.
Funciones en la pista y sonido
A estos dispositivos se suman el e-LSD, el diferencial electrónico de deslizamiento limitado en el eje trasero, que optimiza el rendimiento y el control en las curvas; el N Grin Boost, que ofrece un aumento de potencia de 10 segundos en la pista; el N Launch Control; y el Track SOC, que calcula automáticamente el consumo de la batería en cada vuelta. Por último, la función N e-shift simula las palancas de cambio de la transmisión de doble embrague (DCT) de ocho velocidades, mientras que el N Active Sound + utiliza un sistema de 10 altavoces (ocho internos y dos externos) para ofrecer tres temas de sonido distintos sin echar de menos el ruido térmico.